Estas y otras cuestiones revelan aspectos
importantes que ayudarán a definir y contextualizar el desarrollo de los
modelos para adecuarlos a los objetivos propuestos:
¿Qué elementos forman parte de la red logística?
¿Qué disponibilidad hay de biomasa?
¿Cuáles son los tipos de biomasa consumida?
¿Cuál es la capacidad de consumo?
¿Qué tecnologías de transformación están disponibles?
¿Cual la capacidad de abastecimiento?
¿Cuáles las tecnologías de recogida y transformación de biomasa que existen?
¿Cuáles los tipos de circuitos que deberán existir, para optimizar el uso de la biomasa?
¿Cuáles los costes asociados a su aprovechamiento?
¿Cuál el valor actual por tonelada?
¿Existe diferencia del precio ofrecido en función del tipo de biomasa?